Cristino Moreno Zúñiga
Si
aceptas un trabajo, pon todo tu entusiasmo en él, no lo ejecutes pensando
solamente en la retribución, sino en el éxito.
No
esperes la vigilancia para trabajar, se trabaja más tranquilo(a) sin ella, no
desciendas tu nivel de eficiencia, procura que tus jefes no te hagan
observaciones o llamadas de atención, amonestaciones o extrañamientos; para una
persona responsable sería penoso.
Al
final de cada día haz un recorrido mental confrontado con tu agenda o guía,
para que compares lo planeado con lo realizado, tomando en cuenta algún
imprevisto o reajuste si lo hubo, para que veas tu avance. Esto te servirá para
tu nueva planeación semanal, mensual, semestral o anual, según sea tu caso.
Procura
perfeccionarte para hacerlo cada vez mejor; si algún error cometes en tu
encargo, no busques una excusa, sino un remedio. Todo trabajo tiene una
dificultad, como todo problema tiene una solución: procura experimentar la
satisfacción de realizarlo lo más perfecto posible.
Tu
perseverancia y tu lealtad formarán de tus jefes hacia ti, el sentimiento de
justicia y gracia; tu apatía y tu pereza merecerán sólo la justicia y las
gracias
Logra beneficios por medios honestos, por esfuerzo
propio, por capacidad probada.
Los
ascensos en el trabajo no se conceden por suerte, sino por capacidad que será
demostrada en el ejercicio del mismo.
Las
escuelas, hospitales, clínicas, consultorios, campamentos, talleres y oficinas
en general son lugares de servicio, hazte acreedor(a) a una recompensa, no a
una dádiva.
Presta
atención a estos pensamientos y haz de ellos un objetivo, una meta o un ideal,
un sistema de vida. El tiempo te demostrará los aciertos si los tomas como un
sendero para guiar tu vida laboral y privada. Dentro de ti está la solución de
todos los problemas. Recuerda lo que dice Héctor Tassinari (p.49) en su libro Tú
puedes ser el mejor: “empieza a creer en ti y verás cómo tus sueños
se pueden convertir en realidad”. Te
repito todo depende de ti.
Todo
lo que hagas por tu bien y por los demás, será evaluado cuando llegues a hacer
un balance general de tu vida.
Mis
mejores deseos porque triunfes y seas una persona útil a la Patria, ya que el
País requiere de seres humanos que se desempeñen con calidad y calidez por tu bien y el de los demás. Tu buena fe, tu deseo de superación, el
respeto y el amor por tu trabajo te llevarán al éxito. Suerte.
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