lunes, 7 de marzo de 2016

EL GINKGO BILOBA,


PLANTA  CON PODEROSOS EFECTOS CURATIVOS.

Benito Carmona Grajales.

Numerosos estudios científicos comprueban su eficacia contra enfermedades del corazón y del cerebro.

El ginkgo es una de las plantas más buscadas en el mundo. Estudios científicos han comprobado su efectividad en  la memoria, la función mental, la circulación sanguínea, alergias, el asma y la visión; así como la angina de pecho, la enfermedad arterial, la depresión, degeneración macular, el desempeño sexual, la agregación plaquetaria, el vértigo y la hipertensión, gracias a su poder antioxidante. En China su uso medicinal lleva más de cinco mil años.
     Willmar Schwabe y otros investigadores descubrieron poderosos antioxidantes en esta planta: Los glicósidos de flavona, que combaten los radicales libres  evitando que dañen el ADN lo que provoca enfermedades degenerativas como el cáncer y envejecimiento prematuro. Los glicósidos de flavona que consisten en tres compuestos bioflavonoides: quercetina, campferol e isoramnetina que, además de su función antioxidante, trabajan junto con la vitamina C, evitando el daño producido por la oxidación.
     Las lactonas de terpeno protegen a los tejidos cerebrales de los dañinos efectos de la hipoxia (flujo deteriorado de oxígeno al cerebro); al impulsar la producción de trifosfato de adenosina, aumentan el metabolismo cerebral y la energía corporal. También reduce la coagulación sanguínea; por eso, previene trombosis, apoplejía y enfermedad vascular periférica y la enfermedad cardiaca.  
     El Ginkgo tiene un gran poder para las funciones cerebrales. Nuestros pensamientos,  conceptos, opiniones, creencias y emociones se derivan de los millones de reacciones químicas y eléctricas del cerebro. Para esto, se requiere de una gran cantidad de reservas de energía en forma de oxígeno y glucosa. Gracias a la insulina, el hígado convierte los carbohidratos en glucosa. Estudios en Alemania han comprobado buenos resultados para el tratamiento de insuficiencia cerebral.  Se comprobó un aumento del 57 % en el flujo de sangre a través de los capilares en un plazo de 60 minutos.
      Alzheimer es una enfermedad asociada con una proteína llamada amiloid. Ésta se acumula formando placas inusuales en el cerebro que provocan demencia. El ginkgo restaura parte de la elasticidad de las venas y arterias que se va perdiendo con la edad. Por eso es que también contrarresta el aumento del tamaño del corazón, que es una señal conocida de la presión sanguínea alta sostenida. El ginkgo aumenta el flujo de sangre al cerebro, esto hace que una persona esté más consciente y más centrada. Un estudio en enfermos de Alzheimer que duró 27 semanas dio como resultados una clara mejoría en facultades perdidas.
     Cuando el músculo del corazón no obtiene  el oxígeno y la sangre suficientes para contraerse adecuadamente y seguir bombeando sangre al resto del cuerpo, resulta la isquemia (falta de oxígeno en el corazón) pudiendo originar angina de pecho o un ataque fatal. El ginkgo protege la pared del corazón después de una interrupción en la entrega de oxígeno, ayuda a relajar la constricción de las arterias, mejora la circulación y elimina la aterosclerosis.
     La enfermedad arterial de oclusión periférica (Aterosclerosis obliterans) produce calambres en las piernas. Algunos le llaman claudicación intermitente. Esto puede aliviarse con el ginkgo, que ayuda a aumentar el flujo de sangre; lo que ha sido aprobado por la OMS.  
     En circunstancias normales el cuerpo responde liberando una cascada de sustancias químicas. En los hombres, esto favorece un flujo de sangre que se dirige a un par de bolsas llamadas cuerpo cavernoso que provoca agrandamiento y endurecimiento del pene. Este congestionamiento lo provoca un neurotransmisor llamado óxido nítrico que, a su vez, estimula la producción de la enzima llamada monofostato cíclico de guanosina. Esta enzima hace que las arterias del pene se relajen permitiendo que la sangre fluya. Estudios clínicos demostraron que con 60 mg de extracto de Ginkgo, durante seis meses, hombres con marcadas señales de impotencia, obtuvieron una mejoría sexual. El ginkgo estimula la liberación de óxido nítrico.
     Las cataratas, el glaucoma, la degeneración macular y la retinopatía diabética son las principales causas de pérdida de visión. El ginkgo ayuda en estos problemas de la vista al prevenir el daño causado por la actividad de los radicales libres y al mejorar el flujo de sangre y oxígeno hacia la retina reparando sus tejidos. La retina es una estructura delicada que es altamente vulnerable al daño oxidativo. Los tejidos de la retina también son ricos en ácidos grasos poliinsaturados que son particularmente atractivos a los radicales libres. Científicos alemanes encontraron que 160 mg diarios del extracto mejoraron la visión en cuatro semanas de tratamiento, reduciendo los daños de la retinopatía. También encontraron mejorías en la degeneración macular.
     El glaucoma es el daño en los nervios ópticos que consiste en una elevada presión dentro del ojo. Millones de personas en el mundo padecen mala visión por glaucoma. Los principales síntomas son pérdida de visión periférica, dificultad de enfoques cercanos, halos alrededor de las luces y pérdida paulatina de la visión.  El extracto de ginkgo puede aumentar la circulación de sangre a los ojos pudiendo reducir la presión intraocular.
     En las cataratas tiene mucho que ver la radiación ultravioleta. Éstas son reflejadas en superficies brillantes como la arena, la nieve y el agua o las paredes de los edificios y las calles. El ginkgo es un protector que reduce el daño de los radicales libres causados por la exposición al sol.
     El ginkgo es otra alternativa de salud. Nada se pierde con probar lo que ya los científicos han comprobado.
Benitocarmona52@hotmail,com
Diplomado por el Centro para la Cultura y el Conocimiento de Madrid


1 comentario:

Silvia dijo...

Hola, muy buen artículo sobre el ginkgo. Yo estoy desde hace un tiempo leyendo y escribiendo en un blog sobre él y parece que pese a ser un árbol tan antiguo es muy poco conocido. Yo misma no lo conocía hasta hace más o menos un año que me tropecé con un artículo muy interesante y me picó la curiosidad. Hasta he terminado plantando dos ginkgos en el jardín de casa, uno macho y otro hembra (la hembra todavía no huele mal, que es lo que había leído).

besos