miércoles, 12 de agosto de 2015

El petirrojo y el cristal mágico


Nuby Skayita
Buenas tardes a todos, es para mí un placer y un honor presentar propuestas literarias de personas jóvenes con grandes inquietudes y mucho qué decir, tal es el caso de Ana Marcela quien nos comparte su obra El petirrojo y el Cristal Mágico, una mini novela ubicada en el subgénero de la ficción, con el toque rosa que la convierte en un texto atractivo para leerse desde edades tempranas, para despertar la imaginación: “Para viajar lejos no hay mejor nave que un libro” como dijo Dickinson. En esta ocasión la autora nos lleva de la mano por toda su historia, escrita en primera persona, introduciéndonos en un ambiente fácilmente imaginable: de un bosque idílico, de árboles devorados por espesas nubes, de pajarillos que se estrellan en las ventanas, de cabañas acogedoras, de pasiones humanas como la envidia, el egoísmo, el exterminio del hombre sobre la naturaleza y la aparición de seres  híbridos concebidos directamente de una gran imaginación. Utiliza un elemento común (un ave, que no es cualquier ave, es un petirrojo) y le adjudica un gran poder de sanación que emana de un cristal rojo (porque todos percibimos la literatura de diferente modo), ¡ES PALABRA VIVA! -Cuando ustedes lo lean les podrá parecer azul o verde qué se yo -Bien, esa cosa incrustada en el pecho los distinguía de todos los demás y solo se dejaban ver en circunstancias muy especiales.
Continuando la descripción técnica:
La trama tiene cierto dinamismo, aunque el formato no admita la clasificación dramática, podemos encontrar muchos diálogos
¿Cómo se ve el clima? –Preguntó la amiga un poco desganada
¿Crees que mañana podamos ir por una de esas extraordinarias orquídeas?
-No lo sé, la verdad no se le ven ganas al cielo de dejarnos un rato
Aplaudo el desliz poético arrastrado por tu pluma!
 "No se es escritor por haber elegido decir ciertas cosas, sino por la forma en que se digan. Jean Paul Sartre
Se trata de una creación “inocua” muy cuidada en vocabulario, para quienes tenemos la perversidad homogeneizada en la tinta, podría parecernos ampliamente cuestionable e inverosímil la construcción de conversaciones del tipo:
-Querida amiga, yo no vengo a tener una aventura con nadie, asi que no importa cómo me vea
-Entonces ponte algo de blush
-No, así vámonos ya
-No saldré de aquí hasta que te veas mejor
-Eres muy necia, solo por darte gusto, me pondré algo de blush, únicamente eso ¿ok?

Sobre todo si ubicamos en edades a los personajes. Biólogos egresados, autodenominados “los mejores del mundo”, más bien parecería que se trata de un grupito de chicos de secundaria.
El perfil psicológico del personaje central que es también el narrador omnisciente, nos hace cómplices de su incapacidad para concentrarse, en su actitud dispersa ¡Qué interesante! "El escritor escribe su libro para explicarse a sí mismo lo que no se puede explicar." Gabriel García Márquez
Pero los lectores no debemos tener juicios de valor antes de explorar las páginas de cualquier libro, cada quien tiene derecho absoluto sobre la decisión de sufrir o gozar a través de cualquier género literario
Debo decir que estoy a favor de la creatividad y el talento. Alguien dijo: Existe algo mucho más escaso, fino y raro que el talento. Es el talento de reconocer a los talentosos.
Esta es mi visión desde una colega de oficio:




No hay comentarios: