Xitlalli Domed
Te Amo con toda la fuerza de mi corazón,
Tú me amas también, lo puedo sentir…
Siento tu deseo, siento tu pasión,
Siento la necesidad que invade tu corazón.
Mi pecho arde por ir tras de ti,
Mi mente controla el deseo por vivir,
Mi alma añora el verte sonreír y
Mi corazón late con el poder del amor.
Siento ese hueco en el estómago,
Las miles de mariposas revoloteando por mi barriga,
Mis manos sudan y mi corazón se acelera,
Te siento cerca… lo sé!
Tu cuerpo y el mío son uno;
Pocos kilómetros nos separan 4.75 para ser exactos,
Pero nuestras almas están fusionadas desde
El primer día que hicimos el amor tocando
Solamente nuestras manos y
Fijando nuestras miradas por una larga noche…
Noche mágica que inundo mi corazón
Con sentimientos puros,
Que a pesar de los momentos dolorosos y obscuros,
Se mantienen firmes en la Batalla del Amor.
No temo perder libertad,
No le temo a la soledad,
Solo temo el verte llegar y saber
Que ese sentimiento se ha ido,
A que un día uno de los dos no quiera volver al
nido,
A que esto sea un sueño
Y nunca haya existido.
La Magia de los Reyes
Llego la noche especial que llenará nuestros
hogares de alegría y Bendiciones, pues hoy no solo llegan los Reyes Magos a
dejar juguetes a nuestros pequeños niños en casa, sino también llegan llenos de
Bendiciones y regalos para todos, así como lo hicieron cuando visitaron al niño
Jesús en aquel humilde pesebre y le adoraron como el Rey de reyes, alegraron
esa noche con regalos especiales para él; hoy traen con ellos la unión de
nuestras familias, el amor y la paz que necesitamos para continuar en nuestro
día a día, para que nuestros niños interiores no se pierdan en un mundo tan
materializado, frívolo y superficial.
La alegría de los niños se hará presente en sus
sonrisas y sus miradas brillantes y puras al disfrutar de esos regalos que son
traídos desde muy lejos y con mucho esfuerzo por Melchor, Gaspar y Baltazar; guiados
por las estrellas del cielo a cada uno de los hogares del mundo. Y si acaso no
llegasen los regalos esperados, estemos seguros que llegaran las bendiciones
que cada uno de nosotros necesita en su corazón.
Especialmente la paz y la vida en estos tiempos de
guerra e injusticia, tiempos difíciles para algunos niños del mundo que no
podrán ver un juguete en sus manos, pero que recibirán el amor incondicional y
el calor de un hogar, de una madre o un padre, de una mano amiga y de dios que
nunca nos abandona.
Pidamos con fé esta noche a ellos, para que visiten
los hogares más necesitados de amor, felicidad y paz, para que el regalo más
grande habite en nuestros corazones
La Gratitud
a Dios por la vida y por despertar un día más en el calor de ese hogar.
¡Feliz Día de Reyes!
Xitlalli Domed
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