Carlos Bernal Romero
Yo sin popote no puedo vivir
Oído en McDonald´s
Como pasó con los animales; a los diputados y senadores mexicanos se les metió
la idea en sus “cabecitas” emprender una lucha contra todos los productos que
estuvieran hechos con plástico.
Porque según ellos y una serie de estudios que mandaron a realizar; con esto
estaría a salvo la vida y los animales marinos; en especial las tortugas. Uno
de los primeros objetos que recibió el embate fueron:
Los popotes
A partir de esta iniciativa y ley en todos los restaurantes tendrían prohibido
dar popotes; a menos que el cliente los pidiera de manera específica, pero los
empleados ya no podían darlos ni ofrecerlos.
Desde que tuvo uso de razón; en primero de primaria y a los seis años: Raúl
Pérez Ortega; supo que era diferente a los demás niños de su edad y que para él
la vida sería mucho más difícil.
Pero gracias a sus papás que lo apoyaron en todo, a pesar de la vida adversa
que le había tocado; Raúl siempre fue una persona:
“Echada palante”
De esta manera en el 2019 a los 30 años; era un hombre “Hecho y derecho” con un
trabajo estable y como a él le gustaba decir:
“Que siempre paga sus impuestos”
Cuando se enteró de la medida “Anti popotes”; estuvo de acuerdo con ella;
porque siempre había sido un muy activo ambientalista; dispuesto a luchar para
que toda la flora y fauna de México; estuviera libre de basura y todo tipo de
contaminación.
Aunque por cuestiones personales seguía pidiendo un popote cada vez que iba a
un “McDonald´s” a los cuales se había hecho “adicto” porque podía pasar en
ellos mucho tiempo y sólo con haber comprado u refresco.
En lo que sí le variaba; era en lo que
comía. Podía ser una hamburguesa de las que se vendían en esos restaurantes o
comida que él se llevaba de su casa y era muy variada.
El sábado 27 de julio fue a una de las sucursales que visitaba con frecuencia
porque estaba relativamente cerca de su casa y se podía ir caminando. Hacía
alrededor de 50 minutos.
Pidió un “Mc trío” con:
Hamburguesa, papás y refresco mediano”
Como a pesar de estar a favor de quitar los popotes de todos los restaurantes;
él tenía que usarlos. Cuando le dijo a la jovencita que lo atendía:
“Me das un popote por favor”
Sin apenas haberlo visto le resultó una apasionada ecologista y le hizo una
pregunta lapidaria:
“¿De verdad lo necesita?”
Raúl Pérez Ortega:
Había nacido sin brazos.
McDonald´s
Ferrocarril Hidalgo
17:00 -18:00
p.m.
27/VII/2019
No hay comentarios:
Publicar un comentario